jueves, 27 de septiembre de 2012

La prueba final




Me imagino que los jerarcas del gobierno en su evaluación de la campaña electoral estarán tomando en cuenta como factor principal para el triunfo, la cantidad de misiones y organizaciones de todo tipo que han venido creando en más de diez años. Este componente debe ser al que se le ha asignado mayor peso en el análisis, ya que lo que representó en su momento el presidente para la campaña electoral del 2006 ya no tiene el mismo peso específico, se encuentra muy disminuido, la enfermedad y la falta de un discurso renovado que emocione nuevamente al electorado ha quedado atrás, y si ha esto le sumamos la ineficiencia gubernamental, me lleva  a afirmar que sólo podría ganar la relección si ciertamente todo el aparataje organizacional y comunicacional que ha creado el gobierno ha sido eficaz. 
Para mi entender, y tratando de ser objetivo en el análisis, es lo único que puede salvar al régimen de una derrota aplastante. Todo lo que nos han vendido por los medios públicos será evaluado por el voto popular el 7 de octubre, allí se certificará si es cierto que las diferentes misiones tan pregonadas por el régimen han sido efectivas y eficientes, una de ellas muy promocionada, la misión barrio adentro. Todavía tengo en mente una propaganda que nos hablaba de una cantidad exorbitante de venezolanos atendidos y tratados por este sistema de salud paralelo, al igual que todas las demás, que no suman un número menor de veinte misiones, las cuales han sido reconocidas en su alcance por diferentes estudios, entre ellos uno de la Universidad Católica Andrés Bello, que en el año 2011 nos indicaba que no menos de cuatro millones de venezolanos habían sido beneficiados directamente por alguna misión. Si esto es totalmente cierto, y si le sumamos a ello todos los programas educativos, las diferentes organizaciones de base que realizan actividades en sus comunidades, las madres del barrio, la misión amor mayor, las aldeas universitarias, las casas de alimentación, entre otras más, estaríamos hablando de que sería casi imposible derrotar lo que este régimen representa. Ahora lo cierto es, ¿serán tan efectivos estos programas sociales como nos lo han vendido?, o será otra la situación. A su vez si ponemos del otro lado de la balanza los graves problemas que estamos atravesando todos los venezolanos, como por ejemplo la inseguridad y el alto costo de la vida, debemos preguntarnos si pesará esto más que el pregón del comandante. 
Allí esta el detalle diría el gran "filósofo" Mario Moreno, por ello el régimen debe estar sacando cuentas, como en el dominó, cuando la mayoría de las piezas están jugadas, todos saben lo qué le queda al contrario, es por ello que el 7 de octubre sabremos hasta donde alcanza la verdad, o la falsedad del llamado socialismo del siglo XXI. 

lunes, 3 de septiembre de 2012

El alma de la fiesta





Si la situación del país no fuera de tanta gravedad, uno pudiese hasta bromear con todo lo que sucede. Conversando con un sobrino me hizo referencia, cómo él siente mucho aprecio hacia el presidente, que de verdad le gustaría tenerlo como amigo, e invitarlo a todas sus fiestas y reuniones, por cierto es músico. Hay también que mencionar que a su corta edad no tiene recuerdos de anteriores presidentes. Al interrogarlo por la situación del país, me di cuenta de que está muy claro y consiente con todos los problemas que estamos afrontando, y al preguntarle del por qué le gustaría que fuera el presidente su amigo personal, es allí donde entendí, él lo quiere como amigo, no como presidente, me dice que Chávez en cualquier reunión se convertiría en el alma de la fiesta, cantando, bailando echando cuentos e historias, me dice que sería un compañero de farras increíble, que sus amigos lo celebrarían al verlo llegar a cualquier encuentro o reunión, claro a esa edad la oportunidad de fiestas son inagotables, y mientras lo tuviesen entretenido haciendo lo mejor que hace, tendríamos la posibilidad de elegir un presidente serio que de verdad nos gobierne. 
Este argumento es irrebatible, y además creo que tiene mucha razón, es allí donde es difícil ganarle al presidente, dejar de reírse de algunas de sus gracias es casi imposible, aunque sabemos que terminan siendo morisquetas, no creo que ni el conde del guácharo logre ganarle en el escenario, será por ello que lo extraña como contendor en este proceso electoral, es que a chacu no se le puede negar su carisma y alto grado de simpatía, si se realizara un concurso al estilo de Latín American Idol Presidencial, estoy seguro lo ganaría de punta a punta, ya me imagino al jurado llorando de la risa y aplaudiendo, claro sería un jurado conformado por algún argentino, ecuatoriano, nicaragüense y si falta alguno un brasileño, tendría el resultado más que garantizado, pero hay que ser objetivo, sus dones dan para ello, no hay en la actualidad ningún otro presidente que le pueda ganar, eso sí pediríamos que ese espectáculo durara unos seis años, a ver si nos da tiempo de reconstruir al país, que entre chiste y chiste todos los día nos sucede una desgracia.  
Espero que no sea muy  tarde para que entendamos que no necesitamos a un tipo simpático en la presidencia, que nos llene a diario de cuentos, canciones, y discursos interminables, que estos años de sacrificios valgan la pena,  para que los miles que han sido asesinados por el hampa tengan justicia. Que este triste espectáculo nos ha dejado un deterioro estructural, en todas las áreas, siendo las más marcadas la salud, la educación y la infraestructura,  esto es, entre otras desgracias, lo que nos esta dejando este reality show, que confío que el 7 de octubre finalice, y así el actual presidente se dedique a lo que mejor sabe hacer, echar cuentos y chistes, pero a sus nietos. 

Una historia de nunca acabar

Venezuela esta hundida en una confrontación política que pareciera no tener fin, desde los años ochenta algunos sectores del país decidier...